Estatutos

Muy Humilde y Antigua Hermandad Sacramental del Santísimo Cristo del Remedio de Ánimas y Nuestra Señora Madre de Dios en sus Tristezas

Esta Hermandad tiene su origen en la Cofradía de Ánimas fundada en el antiguo Hospital de San Martín, conocido como Ermita de Nuestra Señora de las Montañas, y cuyos primeros Estatutos fueron aprobados por Don Pedro Fernández Manrique, Obispo de Córdoba, el 24 de septiembre de 1.537. Rendía culto esta Cofradía a una imagen sobre lienzo de Cristo Crucificado rodeado de las Ánimas del Purgatorio.

Los Estatutos originales fueron modificados en 1.541, 1.559 y 1.572, siendo Obispos de Córdoba Don Leopoldo de Austria, Don Diego de Álava y Esquivel y Fray Bernardo de Fresneda, respectivamente, y Hermano Mayor en esta última ocasión Don Antón García Cejudo.

El 5 de diciembre de 1.583 el Obispo de córdoba, Don Antonio Mauricio de Pasos y Figueroa, aprobó los Estatutos por los que se procedía a la unión de esta Hermandad de Ánimas con la Hermandad Sacramental de San Lorenzo, fundada en 1.528, y propietaria de la Ermita de Nuestra Señora de las Montañas.

El 4 de diciembre de 1.690 el Obispo de Córdoba, Cardenal Don Pedro Salazar aprobó los nuevos Estatutos de la Hermandad, que era definitivamente trasladada a la Real Parroquia de San Lorenzo Mártir. Acompañaba ya a la Hermandad una imagen de Cristo Crucificado, conocido como “de los Remedios”, que se dice procedía del antiguo Hospital de San Sebastián. Aunque se desconoce su autor, todos los estudios realizados al respecto han determinado que pertenece a la escuela andaluza del siglo XVII.

A raíz de las Desamortizaciones del siglo XIX la vida de la Hermandad fue languideciendo hasta su práctica desaparición, si bien continuó la devoción de los fieles por su Cristo titular.

El 17 de abril de 1.949, un grupo de fieles cordobeses se reunió con la intención de rehacer la Hermandad del Santísimo Cristo de los Remedios y Benditas Ánimas del Purgatorio. Se redactaron unos Estatutos, basados en los más antiguos conocidos, los de 1.690, que fueron aprobados por el Obispo de Córdoba, Fray Albino González Menéndez-Raigada, el 23 de diciembre de 1.949. Resultó elegido Hermano Mayor Don Francisco Torralba Molina, ocupando el cargo hasta 1.953.

La Hermandad realizó su primera salida procesional el Lunes Santo de 1.951, festividad de San José. Caracterizada por su revitalización de viejas tradiciones de Córdoba, ciertos usos, sin ser exclusivos, conforman desde 1.949 el estilo y la personalidad de esta Hermandad, tales como la sobriedad del hábito, el silencio penitencial, el rezo del Santo Rosario, el uso del escapulario carmelita, el canto del Miserere, el palio de respeto, etcétera, todo ello dentro de un cuidado estilo barroco renovador de tradicionales elementos estéticos cordobeses.

Fueron Hermanos Mayores de esta Hermandad en aquellos años: Don Ángel de la Torre y del Cerro de 1.953 a 1.962; Don Ángel Trujillo Reyes de 1.963 a 1.964; Don Antonio Cabezas López de 1.964 a 1.967; Don Manuel Laguna López de 1.967 a 1.969 y Don Joaquín Aparicio Aneri de 1.969 a 1.972.

Desde 1.972 hasta 1.980 desempeñó el cargo de Hermano Mayor Don Ricardo Ruíz Baena, bajo cuyo mandato adquirió la Hermandad, el 28 de junio de 1.975, la imagen de Nuestra Señora Madre de Dios en Sus Tristezas. Se dice que procede de un antiguo convento de Córdoba, fechándose su realización en el siglo XVIII. La imagen fue bendecida por el Párroco de San Lorenzo y Consiliario de la Hermandad, Don Valeriano Orden Palomino, el 10 de noviembre del mismo año 1.975, pasando a ser Nuestra Señora Titular de la Cofradía.

En 1.975 la Hermandad renovó sus Estatutos, que fueron aprobados por el Obispo de Córdoba, Don José María Cirarda Lachiondo.

La primera salida procesional de Nuestra Señora tuvo lugar el Lunes Santo de 1.977. Precisamente este año, la Hermandad e la Entrada Triunfal en Jerusalén, estando en peligro de desaparecer, fue acogida por la de Ánimas, quien ejerció su regencia hasta 1.981.

En 1.980 fue elegido Hermano Mayor Don José Aguilera Carmona, ejerciendo el cargo hasta 1.992. Bajo su mandato se conmemoró, en 1.987, el CDL Aniversario Fundacional de la Hermandad, con motivo del cual se trasladó solemnemente la imagen de Nuestro Cristo a la Santa Iglesia Catedral, en la que se celebró un Triduo en su honor.

En 1.981 fueron renovados los Estatutos de la Hermandad, siendo aprobados por el Obispo de Córdoba Don José Antonio Infantes Florido.

En 1.992, como prueba de una profunda vinculación de nuestra Hermandad con la Familia Carmelitana, fue afiliada a su Orden Tercera, a la que desde entonces pertenece.

También en 1.992 fue elegido Hermano Mayor Don José Castelló Fernández, bajo cuyo mandato se ha procedido a la redacción de estos Estatutos, aprobados por la Junta de Gobierno el 16 de enero y el 4 de septiembre de 1.995 y por la autoridad eclesiástica el 14 de septiembre del mismo año, para su posterior ratificación por la Junta General de la Hermandad, como último trámite antes de ser presentados a la aprobación oficial del Obispo de Córdoba.

Esta nueva redacción de nuestros Estatutos – la décima desde 1.537- obedece a la actualización de las Reglas tradicionales de esta Hermandad a la fórmula establecida por el Obispado de Córdoba como Estatuto-Marco para todas las Hermandades y Cofradías de la Diócesis.

Aspiran por tanto estos Estatutos a aunar la necesidad de una profunda renovación espiritual y formal, inspirada en las enseñanzas del Concilio Vaticano II y promovida por Su Santidad el Papa Juan Pablo II, con el espíritu de los hermanos fundadores, que esta Hermandad ha tratado de mantener a través de los siglos tanto en el testimonio de vida de sus hermanos como en sus actos y cultos públicos, siguiendo las exigencias establecidas en todas las anteriores redacciones de sus Reglas seculares.

A efectos de lo establecido en los Artículos 39, 40 y 42 de los siguientes Estatutos, este Proemio Histórico no se considera como parte integrante de los mismos.

Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.